
¡Qué rápido se fue el año!
Estuvo lleno de acontecimientos y cambios. A nivel internacional, fuimos testigos de la elección del primer presidente negro en Estados Unidos; tuvimos una tica en Latin American Idol que mantuvo a todo el país pendiente de ella; Nery Brenes destacó en las Olimpiadas de Beijin y el mundo enteró fue y sigue siendo golpeado por la crisis económica en Estados Unidos.
Pero lejos de querer hacer un resumen de hechos, aprovecho para compartir lo que me queda del 2008, lo que dejo atrás y lo que anhelo:
- Un cambio laboral que me reta a probarme cada día como profesional.
- La confianza en uno mismo es la clave para hacerle frente a las pruebas que nos pone Dios en el camino.
- No todo sale como uno quiere, pero luego la vida se encarga en demostrar el por qué.
- No podemos poner en manos de otros nuestra propia felicidad.
- No me arrepiento de lo que hice, si no de no haber tenido el valor para hacer lo que quería. A veces es bueno arriesgarse.
- Hay que decir lo que pensamos y sentimos sin temor. Lo más que puede pasar, es que no pase nada.
- Ser lo suficientemente maduro para aprender de los errores y proponerse a no cometerlos de nuevo.
- Analizar bien las cosas para tomar las decisiones adecuadas, pero no tener temor si no resulta como pensábamos. Todo tiene solución.
- No tener miedo a decir no y decir sí sin temor.
- Si no sabe algo, preguntelo sin pena.
- De cada experiencia vivida, tome lo bueno como recuerdo y lo malo como aprendizaje.
- Di "te quiero" sin temor pero acepta cuando no sos correspondido.
- No aferrarse a un amor imposible.
- Luchar por tus metas sin importar lo que los demás piensen.
- Conserva a tus amigos. No les mientas. La amistad se forja con confianza y respeto.
- Tu familia siempre te apoyará en todo momento.
- Que las críticas destructivas no te hagan daño, especialmente si vienen de personas de poco fiar.
- Rodeate de personas de bien.
- Definir lo que quieras para tu vida.
- Disfrutar cada momento vivido sin pensar en lo que vendrá después.
- Y por último, agradecer infinitamente a Dios por permitirme vivir un año más al lado de las personas que quiero.
Solo me queda desearles a todos un 2009 lleno de bendiciones. En los momentos duros, confíen en sí mismos y verán que lograrán superar los obstáculos que se les presenten.
¡Que todos sus sueños se cumplan!
Estuvo lleno de acontecimientos y cambios. A nivel internacional, fuimos testigos de la elección del primer presidente negro en Estados Unidos; tuvimos una tica en Latin American Idol que mantuvo a todo el país pendiente de ella; Nery Brenes destacó en las Olimpiadas de Beijin y el mundo enteró fue y sigue siendo golpeado por la crisis económica en Estados Unidos.
Pero lejos de querer hacer un resumen de hechos, aprovecho para compartir lo que me queda del 2008, lo que dejo atrás y lo que anhelo:
- Un cambio laboral que me reta a probarme cada día como profesional.
- La confianza en uno mismo es la clave para hacerle frente a las pruebas que nos pone Dios en el camino.
- No todo sale como uno quiere, pero luego la vida se encarga en demostrar el por qué.
- No podemos poner en manos de otros nuestra propia felicidad.
- No me arrepiento de lo que hice, si no de no haber tenido el valor para hacer lo que quería. A veces es bueno arriesgarse.
- Hay que decir lo que pensamos y sentimos sin temor. Lo más que puede pasar, es que no pase nada.
- Ser lo suficientemente maduro para aprender de los errores y proponerse a no cometerlos de nuevo.
- Analizar bien las cosas para tomar las decisiones adecuadas, pero no tener temor si no resulta como pensábamos. Todo tiene solución.
- No tener miedo a decir no y decir sí sin temor.
- Si no sabe algo, preguntelo sin pena.
- De cada experiencia vivida, tome lo bueno como recuerdo y lo malo como aprendizaje.
- Di "te quiero" sin temor pero acepta cuando no sos correspondido.
- No aferrarse a un amor imposible.
- Luchar por tus metas sin importar lo que los demás piensen.
- Conserva a tus amigos. No les mientas. La amistad se forja con confianza y respeto.
- Tu familia siempre te apoyará en todo momento.
- Que las críticas destructivas no te hagan daño, especialmente si vienen de personas de poco fiar.
- Rodeate de personas de bien.
- Definir lo que quieras para tu vida.
- Disfrutar cada momento vivido sin pensar en lo que vendrá después.
- Y por último, agradecer infinitamente a Dios por permitirme vivir un año más al lado de las personas que quiero.
Solo me queda desearles a todos un 2009 lleno de bendiciones. En los momentos duros, confíen en sí mismos y verán que lograrán superar los obstáculos que se les presenten.
¡Que todos sus sueños se cumplan!
